En plena epidemia por coronavirus en España, cuando todo el mundo ansía alcanzar el pico máximo de incidencia,  hemos de recordar que hay personas más vulnerables que otras a la infección, al preverse en ellas una evolución más desfavorable si se contagian.

Grupos de personas más vulnerables al coronavirus

  • Mayores de 65 años: A mayor edad, mayor riesgo de evolución desfavorable, pero se ha de tener en cuenta el estado general de cada persona.
  • Enfermedades crónicas: cardíacas, hipertensión, diabetes, enfermedad pulmonar y renal. Si están descontroladas. Para la diabetes cuando la hemoglobina glicada es mayor del 8%.
  • Personas inmunodeprimidas. Como en el apartado anterior, se ha de valorar presencia de signos o síntomas de infección viral para predecir una evolución desfavorable.
  • Factores psico-sociales: Considerar alternativa al aislamiento en domicilio cuando el estado físico o psicológico de la persona aislada, el apoyo familiar o las condiciones de la vivienda no sean adecuadas.
  • Embarazadas

En esta situación, abordemos el tema de las bajas laborales, en las que los médicos de familia tenemos un importante papel.

Antes, durante y después de esta epidemia, cuando alguien solicita una baja laboral tiene todo el derecho del mundo a recibirla, si existe motivo que lo justifica.

Así sucede si la petición es por la presencia de una enfermedad o por haber sufrido un accidente.

En cambio, si la demanda es por miedo a infectarse del coronavirus en su lugar de trabajo, serán los servicios de riesgos laborales o las mutuas de las empresas quienes han de decidir. Y a tales entidades se les remite desde Medicina de Familia.

Cuando el trabajador pertenece a alguno de los referidos grupos de riesgo, desde dichas entidades suelen recomendar a la empresa que se le destine a actividades en las que se mantenga aislado, lejos del contacto con el público. Por ejemplo, realizando trabajos vía telefónica o internet.

Cuando el aislamiento no es posible, por las características del trabajo o de la empresa, recomiendan baja laboral.

En cualquier caso, estén trabajando o no, es a las personas más vulnerables a quien mejor se ha de proteger.